Ingredientes:

• 1 lámina de masa de hojaldre refrigerada
• 5 manzanas reineta
• 4 cucharadas soperas de mermelada de albaricoque
• 60 gr azúcar
• 20 gr mantequilla
• 150 ml de licor de manzana (opcional)
• 1 pizca de canela en polvo

Paso a Paso:

1. Pela las manzanas y córtalas en láminas muy finas. Reserva media manzana sin pelar ni cortar (para evitar que se oxide), que utilizaremos más adelante para adornar.
2. Ponemos las láminas de manzana en una sartén con la mantequilla y 50 gr de azúcar y espolvoreamos una pizca de canela.
3. Freímos removiendo de vez en cuando hasta que estén tiernas. En este punto, si lo deseas, añade el licor de manzana y deja cocer hasta evaporar el alcohol.
4. Mientras se fríen las manzanas preparamos la base de la tarta. Las láminas de hojaldre ya preparadas no hace falta estirarlas, pero si ves que el tamaño de ésta no es suficiente para tu molde puedes pasar un poco el rodillo hasta conseguir el tamaño deseado, siempre que no difiera mucho uno de otro. Realiza varios pinchazos en la masa para evitar que suba durante el horneado.
5. Pon en el molde papel vegetal y coloca a continuación la masa de hojaldre. Metemos en el horno precalentado por la parte de arriba y abajo a 200 ºC durante unos 7-8 minutos o hasta que veamos que empieza a dorarse.
6. Sacamos del horno y rellenamos el hojaldre con las láminas de manzana fritas y por encima extendemos 4 generosas cucharadas soperas de mermelada de albaricoque.
7. Cogemos la media manzana que habíamos reservado y la pelamos y cortamos en finas láminas. Las ponemos encima de la mermelada para adornar la tarta.
8. Espolvoreamos por encima el resto del azúcar y otra pizca de canela en polvo e introducimos nuevamente en el horno, ahora a 160 ºC durante 20 minutos más.